miércoles, 15 de agosto de 2012
No seas tan cruel, no busques más pretextos...
Cuando uno piensa que la vida está ordenada y resuelta siempre aparece algo en el camino que nos hace tambalear. Lo que habría que preguntarse es: '¿Estaba tambaleándose ya mi presente o me dejo caer porque lo simple me aburre?'.
No tengo respuestas coherentes. Tampoco quiero hacer un discurso filosófico al respecto. Muchas veces nos equivocamos en las elecciones y muchas otras, en dejar pasar el tiempo.
Es difícil salir de una ceguera. La luz parece demasiado brillante al principio y tiene un dejo falso, anti natural. Lo importante sería no dejarse encandilar y pisar firme el suelo, para por fin, dejar de caer.
Lo que intento pensar es en el por qué de las cosas. Supuestamente, todo pasa por una razón. Yo no estaría encontrando algunas respuestas a preguntas que me siguen repicando en el matete. ¿El problema es mío por mentirme o el tiempo me vive jugando una mala pasada?
No disfruto ser adulta. Prefiero jugar con miradas.
Veremos veremos... quizás nunca lo sabremos.
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Será que debemos encontrar la mirada correcta? Cuando uno es niñó quiere ser adulto y cuando somos adultos deseamos volver a ser niños para volver a jugar. No dejemos de creer ni de jugar con esa persona que queremos. Será ese el secreto?
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